Conocí a Javier Iriondo personalmente
hace poco, en una conferencia que daba en el incomparable marco del
hotel THB Reserva del Higuerón en Fuengirola.
Sabía de su existencia, había
escuchado algo sobre su libro y por encima de todo, me apetecía
mucho conocer de primera mano como y de que manera podría saber
donde pueden llevarme mis sueños.
Tras casi dos horas de intervención y
mientras el departía con algún empresario interesado en sus
habilidades y técnicas de motivación y liderazgo yo me acerqué a
comprar su libro y esperar pacientemente mi turno para la pertinente
dedicatoria.
Tras un cordial saludo, estuvimos
brevemente debatiendo sobre la capacidad de liderazgo de un conocido
y prestigioso entrenador de fútbol, leí alguna que otra especial
dedicatoria para aquellos que luchan y buscan sus sueños sin saber a
veces cual es el camino para alcanzarlo y a continuación tomo aire,
me miró fijamente y sobre la primera página en blanco de su texto
escribió lo siguiente:
Para mi amigo Antonio Luis,
con el
deseo de que aquí encuentres aquello que buscas porque ya está en
ti.
Un saludo. Javier Iriondo :)
No quiero contar nada acerca del libro
en concreto desde un punto de vista técnico literario porque mucho
ya se sabe de esta obra, pero si puedo decir que es altamente recomendable para todo
aquel lector que sea como yo, un explorador de frases ocultas y
mensajes al alma escondidos entre párrafos.
Este libro no es un manual de
autoayuda, este libro cuenta una historia y de esa historia plasmo lo
que más me ha llegado como lector.
Una historia labrada por un personaje
con la capacidad de convertir todos los acontecimientos de su vida en
oportunidades para crecer y superarse, alguien al que todos les gusta
estar de su lado, porque estando con él, es sencillamente sentirse
mejor.
Me encanta ese tipo de gentes, a las
que te acercas y todo lo que te transmiten es energía positiva,
experiencia de vida, serenidad y sabiduría. Personas que saben como
enfrentarse a los problemas, que saben como curar las heridas y
sanarlas. Gente que sabe y tiene el don de saber perdonar.
Personas que han conocido el miedo, han
saboreado el fracaso, y que creen firmemente que si tú no esperas
nada de la vida, tienen claro que la vida si espera algo de ti.
Ese tipo de personas que cuando
preguntas: ¿qué tomas para sentirte así de bien?
Responden: - Tomo decisiones.
Gente que como dice Iriondo en su libro
confían en que “el mundo pertenece a los soñadores, a aquellos
que creen en la belleza de sus sueños”
Algún día aspiro a ser así, a poseer
esas cualidades, a hacerlas llegar a los que me rodean, a los que me
conocen y a los que me siguen o leen este sencillo y humilde blog y
porque creo que hay un trozo de mundo que me pertenece, y porque,
sencillamente, soy un soñador.
“Donde tus sueños te lleven”
muestra un camino para dejar de convertirnos en nuestro peor enemigo,
el miedo al mañana y las dudas sobre nuestro futuro destruyen el hoy
y nos impiden disfrutar de lo único que tenemos y sobre lo que
poseemos el control. Nuestro presente.
El miedo debe ser el principal motivo
para actuar y dar el paso al frente rompiendo barreras para abrir un
nuevo camino en busca de la felicidad, impidiendo que ésta no
dependa de las circunstancias externas de nuestra vida.
Las personas pocas veces nos
arrepentimos de lo que hacemos, pero sin embargo, en demasiadas
ocasiones lo hacemos por aquellas cosas que hemos dejado de hacer.
Muchos creemos que es el mundo el que
debe cambiar para que nosotros y nuestro entorno se altere y cambie a
nuestro gusto, cuando somos nosotros los que tenemos que tomar la
iniciativa para que nuestro mundo sea el que cambie.
Nosotros cambiamos nuestro mundo y no
al contrario, y para ello tenemos que cambiar de hábitos, de
pensamientos y de costumbres. No con ello significa que tengamos que
cambiar y romper con todo, pero si cuando estamos sumidos en esa
crisis emocional necesitamos un cambio importante y radical.
Yo me sumo a la iniciativa y en poco
más de una semana, aprovecho que tomo vacaciones y empiezo a cambiar
ciertos hábitos durante un mes, siguiendo las instrucciones y el
decálogo que Joshua facilita a David en el libro de Javier.
No ver la televisión, no escuchar la
radio, ni leer la prensa. Especialmente las noticias.
Rodearme de libros que me ayuden y me
inspiren.
Treinta minutos al día de lectura,
procurando cada vez leer más.
Alejarme de aquellas personas que son
influencia negativa en mi vida.
Dar gracias cada mañana por un nuevo
día y por una nueva oportunidad para vivir.
Beber un gran vaso de agua nada más
levantarme todos los días.
Hacer algo de deporte o actividad
física cada día. Intentar correr o caminar 30 minutos diarios.
Meditar sobre tus objetivos, tus sueños
y tus logros.
Realizar afirmaciones positivas en voz
alta.
Terminar el día leyendo algo positivo
y pronunciar algunas afirmaciones positivas antes de dormir.
Huiré también de los ladrones de
sueños, de los que ponen trabas a tus retos, a aquellos que tachan
de imposibles tus inquietudes y que no consideran los grandes pasos
que espiritual, emocional y personalmente puedas dar en la vida.
Reactivaré el poder de la mente,
sacaré el máximo partido posible al mejor órgano de mi cuerpo, lo
entrenaré e intentaré fortalecer mi yo interior teniendo claro en
cada momento lo que quiero de mi presente y lo que anhelo en mis
sueños.
Buscaré en mis fracasos la oportunidad
que me dan para alcanzar mayor experiencia y seguiré estando
dispuesto una y otra vez a fracasar para con ello poder triunfar en
la vida y valorar mi mayor tesoro, ese tesoro que el maestro regala a
su discípulo en forma de letras y que sin duda alguna es de las
lecturas más maravillosas que han llegado a mis manos nunca y que
por supuesto hago mio y lo comparto.
MI TESORO
A pesar de las desgarradoras
circunstancias y de los golpes recibidos,
a pesar del dolor infligido hasta las
profundidades del alma,
aplastado por los acontecimientos y los
avatares de la vida,
desde lo más hondo de mi corazón me
niego a abandonar y permanecer en el suelo.
Puede que me llamen iluso, pueden que
me llamen loco y no esté cuerdo,
con la incertidumbre, los miedos y las
sombras de la duda por compañeros,
sin importar cuantas veces me caiga o
me tiren,
miraré al frente, me levantaré y
seguiré caminando en busca de mi sueño.
Podrán despojarme de todo, menos de mi
libertad interior y de mi espíritu.
Puedo perder mis bienes, pero jamás me
podrán arrebatar mi patrimonio,
que son mi honor, mi dignidad y mis
sueños, mi verdadero tesoro.
Gracias Javier por este viaje al
interior de mi mismo, por colaborar con tu libro a que mis sueños me
lleven a lugares por descubrir y por encender la llama para uno de
los retos más importantes de mi vida, un sueño que espero alcanzar
el próximo 23 de febrero de 2014.
De mi depende...
1 comentario:
SIGUE ASI...
QUE DESDE CUALQUIER PARTE DEL MUNDO EN EL QUE MI CUERPO, ALMA Y MENTE DECIDAN ESTAR, SEGUIRE TU BLOG PARA QUE POR UNOS MINUTOS ME TRANSPORTES A UN SITIO MEJOR... AUNQUE SOLO SEA DENTRO DE MI MENTE.
UN BESAZO
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