Camino de mi primer viaje a Marruecos, he visitado Melilla, la ciudad autónoma.
Fueron solo unas horas pero lo suficiente para quedar encantado por su ciudadela, enclavada en la roca, vigía marinera, atenta a todo lo que acontece en el mediterraneo africano.
Imaginaba yo a esta ciudad estancada aún en el siglo pasado, nada más lejos de la realidad.
Melilla, africana o europea, marroquí o española, en cualquier caso... Melilla maravillosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario